El mundo de la repostería nupcial está cambiando mucho para adaptarse a los nuevos tiempos y nuevas exigencias de los novios. En estos tiempos de modernidad, en los que todos los detalles que componen una boda están cambiando a un ritmo vertiginoso, el postre nupcial no se puede quedar atrás y cada día hay ideas muy interesantes y sugerentes.
Poco a poco ha ido variando el concepto de tarta nupcial, que consistía en una tarta de varios pisos que los novios cortaban dentro de una especie de ritual. Hoy en día son pocos los novios que siguen siendo fieles a esta costumbre. Ahora lo realmente complicado es acertar con el postre.
Postres diferentes
En anteriores post os sugeríamos novedades como cupcakes, tartas personalizadas, postres creativos… En esta ocasiones os proponemos apostar por un buffet de postres. Bien es sabido que ¡para gustos, colores! Esto permite a los novios ofrecer a sus invitados una variedad a la que no podrán resistirse ningún de sus invitados. Al margen de estar entretenidos y relacionarse entre ellos, pueden elegir entre pastelitos, cupcakes, galletas, golosinas, caramelos…¡es un acierto seguro!
Además estos pueden hacerse “temáticos”, centrándoos en algún ingrediente que os guste mucho a vosotros (chocolate, vainilla, limón, fresas, cerezas…) o en algún color que vaya a juego con la decoración que hayáis elegido. Se pueden colocar sobres mesas con manteles, muebles antiguos, carritos, barras y en todo tipo de recipientes, ¡¡las posibilidades son infinitas!!
